Experiencias: Laboratorios creACtivos con Alex Carrascosa

“¿No ez increíble todo lo que puede tened dentro un lápiz?” Guille

Alex Carrascosa es un artivista (arte + activista), como el mismo se denomina. Ha estudiado bellas artes y desde hace muchos años, entre otras muchas cosas, desarrolla unas dinámicas que denomina Laboratorios creACtivos (creatividad + actividad) La experiencia es realmente sorprendente, entretenida y valiosa.

La desarrolla en grupos abiertos, con personas de diferentes procedencias y experiencias de vida, de hasta 12 personas. Muchas veces mezcla personas en procesos de inclusión e inserción social con otras personas que no vienen de estas experiencias. En diferentes sesiones, que tienen una duración media de tres horas cada una, las personas van generando grupo, se van encontrando y van desarrollando diferentes dinámicas que tienen que ver con el arte, la creatividad, la expresión pero también con el trabajo en equipo, con la resolución de conflictos, con la construcción de procesos positivos. Estos laboratorios son muy creativos no haciendo falta tener conocimientos específicos sobre arte. Están guiados por Alex de forma magistral y se van desarrollando sobre una base de diálogo y participación permanente.

Alex trabaja mucho sobre la deconstrucción de diferentes procesos para construir otros nuevos en positivo. Los materiales que utiliza son muy sencillos y requieren muy poca inversión, Además la gente se lo pasa realmente bien en un ambiente muy cercano y cooperativo. En algunos momentos trabaja pintando mandalas, en otros haciendo cometas tuneadas con mensajes positivos, en otros convirtiendo armas en personajes animados, se construyen tótems con materiales reciclados, se crean historias tipo comics que empiezan y finalizan en el mismo punto, hace esculturas (intervenciones) en la playa con materiales que llegan a las costas traídos por el mar. Son mil y una ideas diferentes. En todos los talleres reina el buen humor, la creatividad y la expresión, tanto personal como grupal.

Para las personas en procesos de inserción social son talleres realmente entretenidos, en los que pueden mostrar su creatividad, expresar sus emociones y pensamientos, en los que trabajan en grupo y se encuentran con otras personas, se relacionan, cooperan. También pueden reflexionar sobre la resolución de conflictos, sobre la convivencia… el objetivo de Alex es conseguir que la gente se interrelacione a través del arte y creen cosas juntos. Busca mejorar el entorno que rodea el ser humano utilizando diferentes ramas artísticas. Realmente, a través de los Laboratorios creACtivos, lo consigue.

Referencias sobre Alex Carrascosa: http://www.talentyart.com/biblioteca/dia-tekhne-dialogo-a-traves-del-arte-de-alex-carrascosa

http://www.bakeaz.org/es/autores/mostrar/230-carrascosa

 

Las personas en procesos de inserción social necesitan formación en ocio.

"¡Sonamos muchachos! ¡Resulta que si uno no se apura a cambiar el mundo, después es el mundo el que lo cambia a uno!" Mafalda

Tengo la percepción que cuando hablamos del arte, la cultura o el ocio nos referimos a su aspecto recreativo, a las actividades en si, dejando otra parte del proceso olvidada. Hablo de la formación, elemento clave para aquellas personas que están en procesos de inclusión e inserción social. No olvidemos que el ocio, además de estar basado en experiencias gratificantes y placenteras, también está basado en la libertad de elección y en la autonomía para desarrollarlas. Por estos últimos motivos es que la formación en ocio es necesaria y un gran apoyo para las personas en procesos de inclusión social.

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No estoy hablando de formaciones regladas, largas o muy elaboradas sino de pequeñas píldoras formativas, muy concretas, concisas y directas que ayuden a las personas en procesos de inserción social a entender lo que es el ocio, a valorarlo, a conocer y practicar sus habilidades sociales, a saber dónde pueden encontrar agendas culturales, a través de que herramientas las pueden encontrar o revisar, cómo se leen las agendas culturales, como se hace una programación, el valor de la planificación, el uso del dinero y la importancia de disponer de cierto dinero para disfrutar del ocio… También se trata de ayudarles a descubrir cuales son sus gustos, sus hobbies, las actividades que disfrutan. Parte de nuestro error puede estar en dar por hecho que conocen todo esto. Es cierto que en algunos casos es así, pero en la mayoría es todo lo contrario. No saben muy bien por donde coger el tema del ocio, ni para qué les puede servir, ni como desarrollarlo, se sienten muy perdidos y su motivación suele ser baja.

Estas herramientas, estas destrezas, les van a permitir moverse con mayor libertad y ser más autónomos en lo referente al ocio, la cultura y el arte, saber dónde buscar, qué buscar, reducir esa sensación de sentirse perdidos... Estas pequeñas formaciones deben trabajar sobre el aburrimiento y la ansiedad que les produce, la posibilidad de equivocarse a la hora de elegir una actividad de ocio (no siempre acertamos) y la importancia de probar aquellas cosas que nunca hemos hecho, eliminando posibles prejuicios y dando la oportunidad a descubrir nuevas aficiones.

Mi impresión es que desde la educación social cuidamos muchos aspectos y tratamos de hacer un trabajo integral realmente valioso pero que en el plano del ocio y la cultura, nos quedamos algo cortos pensando que siendo temas muy importantes pueden ser fáciles de desarrollar. Mi experiencia me dice que sin estos apoyos formativos las posibilidades de éxito en este campo del ocio y la cultura se reducen con lo que dificultamos la incorporación e inclusión social de las personas que están en estos procesos.

Creando oportunidades!!!

"¿Y si en vez de planear tanto voláramos un poco más alto?"  Mafalda

Artes, artistas, inclusión social, crisis… llevo días dándole vueltas a estas cuatro palabras, al valor de todas ellas, a su interrelación, a su importancia, a sus sinergias. Al igual que uno de los fundamentos del marketing dice que en tiempos de crisis es cuando más hay que invertir en marketing y comunicación, creo que en los tiempos de crisis actuales es cuando más debemos invertir en cultura, arte y en las personas que lo llevan adelante.

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Leo con preocupación los muchos espacios relacionados con el ocio y el arte que se van cerrando, las muchas subvenciones relacionadas con estos campos que se van eliminando o reduciendo, veo las grandes dificultades que tienen las y los artistas para poder desarrollar su trabajo y me pregunto ¿Por qué no volaremos más alto en vez de planear tanto?

Soy de los que piensa que el arte, las personas dedicadas al arte, la cultura, y el ocio van a ser de gran importancia para superar esta crisis, como siempre han sido importantes para superar las crisis anteriores. Ellos y ellas crean oportunidades, generan innovación, creatividad, son fuente de expresión, de disfrute, de bienestar, generan esperanzas, nos mueven al optimismo, nos distraen, mejoran nuestro carácter, nos ofrecen respuestas, alternativas… Cuidémoslos, no les demos la espalda, es importante que haya espacios en donde el arte y los artistas puedan desarrollarse en plenitud, es importante que las personas apoyemos sus propuestas, participemos de ellas, las disfrutemos, que impulsemos políticas públicas y privadas relacionadas con el arte y la cultura, valoremos su trabajo, sus propuestas, su imaginación, sus sueños, sus esfuerzos por sacarnos de la mirada gris, del uni-canal, de la desesperanza y el miedo.

Y este impulso, siendo importante para salir de la crisis (como si fuera poco!!!), es todavía más vital para las personas que están en procesos de inclusión e inserción social, ya que el arte, en todas sus manifestaciones, les permite relacionarse, integrarse, expresarse, mostrarse, hacerse visibles, superar barreras, formar parte de una sociedad, les da un bienestar personal, les ayuda a desarrollarse, les da salud, les ofrece horizontes vitales, les da una esperanza y les crea nuevas oportunidades. La crisis actual está trayendo más personas a los procesos de exclusión, ambas palabras, crisis y exclusión social están relacionadas. Y no olvidemos que una exclusión trae otra exclusión... Recortando en arte y cultura no estamos favoreciendo una vida mejor

Dejemos de planear tanto, levantemos el vuelo, miremos el mundo de otra manera, con otros prismas, dejemos que los artistas nos guíen en la construcción de un mundo mucho más justo, solidario y sostenible, mucho más equitativo y equilibrado, no miremos a otro lado, dejémonos tocar por el arte y por todas sus expresiones… seremos más felices y viviremos mejor.

Algunos aportes al proceso de inserción desde el ocio

¿Pensaron alguna vez que si no fuera por todos nadie sería nada? Mafalda

 Todas las personas en procesos de inserción social deben recorrer un camino que la mayoría de las veces es largo, complejo y lleno de dificultades. En todo este proceso, la presencia del ocio, el disfrute del mismo a través de diferentes actividades y propuestas, se convierte en un facilitador muy eficaz que debiéramos utilizar siempre que sea posible.

Aunque los motivos por los que las personas están haciendo procesos de inserción / inclusión social son muy diversos (drogas, prisión, prostitución, inmigración, enfermedades, discapacidades, jóvenes…) y cada uno tiene sus propias especificidades, no podemos obviar que también tienen sus puntos en común. Normalmente son procesos largos, complejos con nuevas formas de funcionamiento, con varios niveles de trabajo: educativo, médico, terapéutico… Procesos en los que tienen que identificar y trabajar sus dificultades, enfrentarse a ellas, superarlas, en los que deben aprender a conocerse y aceptarse, en los que las personas tienden a mostrar muchas dudas, desconfianzas y miedos. Es bastante habitual que estos procesos sea un sube y baja de emociones y dificultades en los que sienten tristeza, desmotivación, dudas, miedos, cabreos, cierta ansiedad, sensación de estar perdidos, baja autoestima, estrés…

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En una ocasión preguntamos a grupos en procesos de inserción cuales eran algunas de las dificultades que estaban encontrando en su proceso. Hablaron de agobio, estrés, dudas, comerse la cabeza, tensiones, frustraciones, desmotivación, miedos, aburrimiento, no saber qué hacer, ni para qué, ni dónde ir, soledad… Y justo en ese momento comenzamos a realizar un trabajo específico y concreto de actividades y dinámicas de ocio (que respondía a sus necesidades, gustos y demandas) como apoyo a los procesos educativos, terapéuticos y sociales.

Un mes después nos sentamos con el grupo de trabajo, ya con la percepción de que las relaciones dentro del grupo eran mejores y el ambiente menos cargado, y les preguntamos que aportes les había ofrecido la vivencia de las diferentes actividades y propuestas de ocio. Hablaron de motivación, descanso, de pasarlo bien, de disfrute, de despejarse, reírse, llenarse de energías, rebajar tensiones, no comerse la cabeza, salud, diversión, satisfacción, evasión, liberación, descubrir nuevas cosas, sitios, de mejorar calidad de vida.

Y es que todo trabajo que debemos realizar, sea cual sea pero más cuando, como los procesos de inserción / inclusión social, es muy complejo y estresante, se realiza mejor si lo acompañamos de la risa, de la diversión, del entretenimiento, si lo acompañamos desde diferentes ramas artísticas que permitan la expresión de las emociones, si lo facilitamos desde las energías positivas que impulsa el ocio. Seamos creativos, precisamente en un espacio y con un espacio en el que la creatividad es una de las razones de ser, añadamos esta herramienta, este medio, a nuestros procesos de inserción / inclusión social… es todo ganancia. No olvidemos que trabajamos con personas, que las personas son el centro de nuestro trabajo y que buscamos su bienestar, su calidad de vida y el ocio es uno de los grandes caminos por los que transitar para obtener estos objetivos.